Aciertos que parecieron errores

Llamaron al timbre de la puerta y tardé un poco en llegar, y eso que eran apenas unos metros, pero con la barriga tan gorda, me movía malamente. Por la mirilla la imagen de un joven con chaqueta, corbata, repeinado, un vendedor, un viajante. Le abro y me cuenta su catálogo, ensayos, enciclopedias. No, gracias, cojo libros de la biblioteca pública, novelas, biografías, sigue desgranando el joven comercial haciendo su trabajo, me gusta ir a las librerías, argumento, no quiero comprar nada, prefiero ojear las estanterías y decidirme, biografías, diccionarios, continúa en uno de los más arduos oficios, el de puerta … Continúa leyendo Aciertos que parecieron errores

De la novela 3

Santi alquiló un piso que no estaba mal. Oscuro, con la puerta cristalera del minúsculo balcón de la sala y las dos habitaciones alineadas en la derecha del pasillo hacia el mismo patio que se estrechaba como vértice de triangulo a partir de la última ventana, la del cuarto principal. La ventana de la cocina daba a otro patio distinto, al que se abrían también las cocinas de los vecinos. Oías el vapor de la cocción de sus ollas rápidas, olor a repollo y carne guisada, cómo batían el tenedor contra los platos preparando la cena, las puertas al cerrarse que … Continúa leyendo De la novela 3